
LA PIEL, DURANTE EL DÍA Y LA NOCHE
El día
La piel sufre las múltiples agresiones del día a día (variaciones climáticas, el viento, los rayos uva, la contaminación, la cal…) Dispone de poca energia y se regenera mal.
La crema de tratamiento forma un auténtico escudo para protegerla.
La noche
La energía está disponible para la piel y le permite regenerarse naturalmente desde el interior. Pero con la edad y el cansancio, este mecanismo de regeneración nocturna no funciona muy bien y los signos de la edad se instalan.
HAY QUE REACTIVAR LA REGENERACIÓN EPIDÉRMICA NOCTURNA
LA MASCARILLA “PERFUSIÓN” DE ACTIVOS CONCENTRADOS
Durante la noche, la mascarilla “difunde” sus activos concentrados para borrar los signos de la edad.
Al despertar, la piel está lisa, los surcos de las arrugas rellenados, repulpada, la piel está resplandenciente de juventud.